Conocé a Julio César Aguirre, el empresario que lo dio todo hasta sus 48 años para dedicarse a su verdadera pasión por el yoga.
"Yo fui artífice de mis propias necesidades. Sufrí los avatares de mundo empresarial y sabía controlar ciertas emociones teniendo algunas herramientas", dice Julio Aguirre, fundador de Yoga para empresas.